El pintoresco pueblo de Roccastrada, en el corazón de Maremma, se encuentra a 475 metros sobre el nivel del mar, dominando la rica llanura de tierras de cultivo que hay debajo, de la cual es la capital administrativa. Como muchos pueblos de esta zona, es un asentamiento medieval que una vez fue gobernado por la familia Aldobrandeschi antes de pasar eventualmente a manos de Siena.
Finalmente, fue ganada por el Gran Duque de los Medici de Toscana en el 1555. La zona estaba solicitada debido a su supuesta riqueza en cobre, plata y oro; incluso los Etruscos explotaban este lugar. En el siglo pasado, ha permanecido comparativamente despoblada, lo que hizo que la zona alrededor de Roccastrada sea uno de los lugares más auténticos y salvajes para visitar Toscana.
Al salir de la ciudad de Roccastrada, hay 146 km de senderos marcados por Trekking Roccastrada que van desde 110 a 800 metros sobre el nivel del mar y que son accesibles todo el año. La botánica y la vida silvestre son placenteramente variadas, con particularidades como el tejo y el tritón alpino que se encuentran en la reserva natural de Sassoforte y en el Valle Farma , restos de la Edad de Hielo. Es común ver animales salvajes, desde ciervos hasta jabalíes, zorros y gatos salvajes, en todos los senderos, parques e incluso en las carreteras de la zona.
Si te gusta la buena comida y quieres probar los alimentos de Maremma, el Camino del vino y la comida de Monteregio de Massa Marittima es el lugar ideal para ti.
Emprende un viaje para probar el DOC Monteregio para experimentar de primera mano las fértiles tierras de cultivo en Maremma, durante mucho tiempo el granero de Toscana beneficiándose de un clima mitigado por el mar, siempre unos grados más cálido que el de Florencia. El territorio vinícola de Monteregio se encuentra en la Alta Maremma de Grosseto y abarca los Municipios de Massa Marittima, Monterotondo, Montieri, Follonica, Scarlino, Gavorrano, Roccastrada y Castiglione della Pescaia. Las uvas que se cultivan en esta zona son Vermentino y Viognier para los blancos, y Sangiovese y Syrah para los tintos. Desde las bodegas artesanales hasta las grandes y organizadas, organiza tu visita para probar y experimentar los sabores de esta tierra.
Durante el recorrido, comparta esos vinos con los sabores caseros de los platos tradicionales de Maremma: tortelli y acquacotta (sopa de verduras) todo el año, pappardelle con salsa con liebre o con jabalí en temporada de caza, quesos de pecorino (cabra), salchichas de jabalí y especialidades de otoño: castañas, setas y vino novello.